El poeta Efraín Miranda |
La historia
no es la historia necesariamente. Pero si hubiese que
comenzarla
por alguna página, habría que nombrar a un poeta
peruano
autor de una poesía disímil escrita desde el Perú
recóndito.
Leer la poesía de Efraín Miranda es generar una postura
crítica
frente a las convenciones sentimentales no sólo del escribir,
sino
también del leer. El lector de Miranda debe llegar a esta Poesía
reunida despojado de remiendos
culturales, habiendo dejado atrás
los lugares
comunes de una época e idiosincrasia. Si existiera la
necesidad
de extremar el asunto, diríamos que su mejor lector sería
iletrado:
aprendería a leer en estos textos el origen de la vida y de
la
sabiduría. Es verdad que la poesía mirandiana ha sido poco
difundida,
pero se ha mantenido firme sólo en su propio fluir, en su
irreductible
transitoriedad; a veces sincrónica con los postulados de
Gilles
Deleuze, según los cuales, el poeta es un extranjero en su
propia
lengua, para significar la extrañeza de la creación y la
enajenación
permanente del creador. Transcurrido el tiempo,
Miranda es
el desvelamiento de una de las más disímiles estéticas
orientada
desde los impulsos que genera la terredad que, como
movimientos
tectónicos, llevan el canto cósmico a un ser actual, por
lo que la
reconditez de esta poesía es variable y relativa. Desde
Muerte
cercana
y hasta Padre Sol, la poética de Miranda está
poblada de
nuevas formas para la expresión de los
estremecimientos
y de las ideas, tanto precisas como sugerentes y
subjetivas,
por proceder de percepciones analíticas y artísticas
legítimas,
indias. Así, la obra mirandiana no sólo se muestra
irreverente
frente a manidas retóricas, sino también frente a la
noción de
la pureza del lenguaje. Siendo un lector insaciable en las
soledades
de Jacha Huinchocca, este efecto de extrañeza se
exacerba
cuando las palabras pueden pronunciarse en español y
también en
indio.
Darwin Bedoya
Portada del libro (inédito - Grupo Editorial "Hijos de la lluvia"). Fotografía de portada: Camilo Sánchez Serruto. |
No hay comentarios:
Publicar un comentario